viernes, junio 08, 2007


¡Hey tú!

Sí tú,

el de los ojos pequeños,

el de mirada escurridiza

Tú, el que cuando pone su mano en mi entrepierna

hace que llueva en verano.

Tú el de las historias de niño explorador.

Tú el de las manos con olor embriagador a loción y cigarro que provoca paroxismo a mis sentidos;

Tú el de la boca que quema mi pezón izquierdo,

y el derecho también;

Tú el que mira desde atrás,

ven,

tómame,

embriagame

acuéstame,

mojate,

penetrame,

llénate,

muérdeme.

Hey tú, no te quedes ahí paga la cuenta y

vamonos, que mi piel te espera

en el hotel de enfrente.